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Tras las huellas de Nerón

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El Parque arqueológico del Coliseo conserva las huellas de la visión arquitectónica y de la política urbanística de Nerón. En una entrevista inédita doble, Alessandro D'Alessio y Federica Rinaldi, funcionarios arqueológicos del PArCo, recorren las fases de la construcción de la “nueva Roma” que Nerón habría querido refundar durante su principado. El itinerario se articula a través de seis etapas desde el Palatino (Criptopórtico de Nerón, Domus Transitoria/"Baños de Livia", coenatio rotunda), por el valle del Coliseo hasta la Colina del Oppio, dentro de la Domus Aurea.

 

  1. EL CRIPTOPÓRTICO DE NERÓN

AD'A: Cuando los emperadores trasladan su residencia al Palatino y el Palatino se convierte en el Palatium, los espacios y ambientes ricamente decorados se conectan entre sí a través de pasillos y pasadizos, a menudo subterráneos. Entre ellos, aún se puede recorrer el largo Criptopórtico que comúnmente se atribuye a Nerón. ¿Pero es correcta esta atribución cronológica?

FR: En realidad no. El criptopórtico formaba parte del conjunto de palacios de la Domus Tiberiana, el primer palacio imperial concebido de manera orgánica y monumental y ubicado en la parte noroeste del monte Palatino. Aunque es posible que ya lo hubieran hecho Tiberio y Calígula, Claudio y especialmente Nerón transformaron los distintos núcleos de las domus de finales de la República y principios del Imperio ya existentes, en un palacio arquitectónicamente unitario, englobando en su interior los distintos sectores. El criptopórtico era un pasadizo subterráneo, iluminado por tragaluces, que comunicaba estos sectores de la pendiente del Palatino con las casas de Livia y Augusto: Nerón lo único que hizo fue ampliarlo (¡se ha calculado una longitud de hasta 130 m!) y decorarlo con pavimentos de mosaico en blanco y negro y estucos maravillosos. Una parte de estos estucos, con casetones, elementos verticales y cupidos, tras la reapertura al público entrarán a formar parte de las obras expuestas dentro del Museo Palatino y podrán ser admirados por todos.

Criptopórtico, videomapping

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

2. LOS LLAMADOS BAÑOS DE LIVIA

FR: En cualquier caso, ¡está claro que la intervención en el criptopórtico no fue la única actividad de Nerón en el Palatino! Las fuentes dicen que, antes de construir la Domus Aurea, realizó una residencia que desde el Palatino se extendía al Esquilino y que se llamaba “transitoria”. Más tarde, en el siglo XVIII toda la zona fue identificada con los llamados Baños de Livia, aunque en este caso, no se trata ni de "baños" ni mucho menos pertenecían a la mujer de Augusto.

AD'A: Sí, así es. Suetonio (Nerón, 31, 1) afirma que el emperador «En nada gastó tanto, sin embargo, como en sus construcciones; extendió su casa desde
el palacio hasta las Esquilias, llamando al edificio que los unía Casa de Paso; destruida ésta por un incendio
[evidentemente el del 64 d.C.] hizo construir otra que se llamó Casa de Oro». Se trata, por tanto, del primer palacio edificado por Nerón entre el Palatino y el Esquilino, pero del que muy poco conocemos, excepto por las estructuras subyacentes, la coenatio Iovis, de la siguiente domus Flavia: en realidad un monumental ninfeo y triclinio semisubterráneo que fue descubierto en 1721 e identificado por error como los baños por la presencia original de los caños de agua situados en la base del ninfeo, interpretados en la época como bidés y atribuidos igualmente por error a Livia debido al hallazgo de una fistula (tubo) de plomo con el nombre de Augustus y la figura del águila.

 

3. EL AULA PORTICADA Y LOS PAVIMENTOS DE MÁRMOL BAJO LA CASINA FARNESE

AD'A: Nerón también pasó a la historia por la experimentación en pavimentos de mármol, únicos tanto por su diseño como por los colores elegidos, que en la actualidad llamamos “tetracromía neroniana”. Además de los pavimentos de la Domus Transitoria, ya con un altísimo nivel de innovación, “por debajo” de la Casina Farnese se conserva lo que puede ser considerado un “típico” ejemplo de pavimentación en mármol de la época de Nerón. Pero, entonces, ¿estamos hablando de la Domus Aurea, la misma que visitaremos después en la Colina del Oppio?

FR: El pavimento al que te refieres originalmente decoraba un aula porticada de grandes dimensiones. Los ricos mármoles y el sistema arquitectónico del espacio, que recientes estudios han intentado ubicar en el sistema de palacios del Palatino, se sitúa entre la fuente oval perteneciente al gran

triclinio del palacio de Domiciano

–del que están separados–, y los espacios de la Domus Transitoria que acabas de describir: la atribución a época neroniana –y actualmente con el juicio unánime de todos– a la fase de la Domus Aurea, posterior al incendio del 64 d.C., convierte a este pavimento en opus sectile en el ejemplo más complejo y, al mismo tiempo, más perfecto de este tipo llegado hasta nuestros días desde la antigüedad romana. Dentro de un módulo cuadrado-reticular se reconoce un dibujo con motivos geométricos y elementos vegetales, realizados con variedades de mármol, pórfido rojo egipcio, pórfido verde griego, amarillo antiguo y pavonazzetto. Gracias también a la restauración realizada hace más de un siglo por Giacomo Boni, aún podemos apreciar la destreza en el uso de los dibujos curvilíneos de los motivos delineados con cortes precisos y combinaciones milimétricas.

4. LA CENATIO ROTUNDA

FR: Sin perder de vista a Nerón, una vez más las fuentes nos cuentan que el emperador tenía una idea megalómana de la planificación urbana y la arquitectura, hasta tal punto que quiso introducir en su visión de “palacio”, inspirado en los modelos orientales, la realización de un comedor redondo y giratorio. ¿Leyenda o realidad?

AD'A: Vamos a ver, manteniendo válida la referencia a los complejos de palacios de los gobernantes helenísticos (de Alejandría, Egipto, en primer lugar), pero también a las villas marítimas de la costa de Campania, una vez más Suetonio nos cuenta que dentro de la Domus Aurea existían cenationes (comedores) con «techos cubiertos con placas de marfil, móviles y perforadas para facilitar la caída de flores y perfumes» y en especial en una de ellas, la cenatio rotunda, «que constantemente, día y noche, giraba en función del movimiento del mundo [alias cosmo]». Durante mucho tiempo se pensó que se trataba de la sala Octogonal del pabellón de la Colina del Oppio, pero recientemente ha sido identificada en una alta y majestuosa estructura de ladrillo descubierta por los arqueólogos del École Française de Rome en el límite norte del área de la viña Barberini en el Palatino. Esta estructura, realmente impresionante, está compuesta por un cilindro que contiene una escalera de caracol, conectado a un anillo más grande y exterior a través de una serie de arcos distribuidos en varios niveles (8 para cada uno) y rodeado por un tercer anillo aún más amplio. El hallazgo de los restos de lo que podría ser un mecanismo hidráulico, hizo pensar a los descubridores que esta podría ser la "sala giratoria" descrita por Suetonio, si bien lo que se movía era el suelo de madera y no la bóveda. ¡Una especie de Fungo dell’EUR! Personalmente, no estoy muy de acuerdo con esta identificación de la construcción de viña Barberini, para la que se pueden hipotetizar otras interpretaciones, quizá más plausibles. Por el momento, la ubicación de la célebre cenatio sigue siendo una incógnita.

5. EL STAGNUM NERONIS Y EL COLISEO

AD'A: Como bien sabes, desde las ramificaciones del norte de viña Barberini y, en concreto desde este punto, se disfruta de una vista inigualable del valle del Coliseo, pero si borráramos el Anfiteatro de esta postal en su lugar veríamos el Coliseo y el stagnum Neronis. ¿Qué podemos decir sobre sus funciones y significados dentro de la organización de la Domus Aurea? ¿Y por qué los Flavios eliminaron el lago para sustituirlo por un anfiteatro, el Coliseo?

FR: Estos dos elementos forman parte del intento de Nerón de emular los modelos de los palacios de los soberanos helénicos: dos pasos para la divinización del soberano durante su vida y para la creación de un microcosmos destinado a superar los confines del Palatino, convirtiendo Roma en su casa. En el centro estaría el estanque, el lago artificial en el que Nerón proyectó hacer converger los pabellones del “palacio”, eje de la nueva Roma para la que era necesario rediseñar todo el plan urbanístico y arquitectónico. Pero este modelo de poder concentrado en un solo hombre será alterado en breve por la muerte de Nerón y la llegada al poder de la nueva dinastía de los Flavios: lo que era de uno solo, vuelve a ser de todos. El palacio se retira de nuevo al Palatino y en lugar del estanque se construye, a beneficio de toda la ciudad y de todo el imperio, el mayor lugar para espectáculos jamás visto por Roma: el Anfiteatro Flavio.

6. LA DOMUS AUREA

FR: Pero vayamos más despacio. Volviendo a Nerón para terminar nuestro paseo del Palatino a la colina del Oppio, no podemos olvidarnos de la célebre frase pronunciada por el Emperador el día después de haber terminado la obra de la Domus Aurea: “¡Finalmente empiezo a vivir en una casa digna de un hombre”! Pero, ¿de cuántos metros cuadrados estamos hablando? ¿Y cuántos pabellones podían contarse por las colinas de Roma?

AD'A: Esta es la pregunta justa para confirmar lo que acabas de decir. Lo que Nerón hizo construyendo la Domus Aurea constituye, tras el de Calígula, el único intento por parte de un soberano romano de superar los límites del Palatino para exportar la residencia imperial y sus arquitecturas fuera de él, extendiéndose por toda el área central de la ciudad y dando forma y consistencia a un microcosmos urbano inédito que lo invade todo, un intento de Neropolis que hace que Roma domus fiet. He aquí las cifras: la Domus ocupaba una superficie de unas 80 hectáreas, lógicamente no completamente edificadas, pero que englobaba por entero el Palatino y la Velia, el Celio, el valle del (sucesivo) Coliseo y la colina del Oppio. Es justo aquí donde se encuentran los restos más importantes y espectaculares del palacio de Nerón, el gigantesco pabellón de verano al que todos llaman en la actualidad Domus Aurea. Sepultado por los túneles de infraestructura de las Termas de Trajano, se extiende sobre una superficie de unos 16 000 m2 (más o menos 3 campos de fútbol) y contiene más de 150 salas de más de 10 m de altura que aún están revestidas con maravillosos frescos de finales del siglo III y principios del IV en estilo pompeyano, con una superficie total de la decoración pictórica y en estuco de aproximadamente 30 000 m2. Para dar una idea general del impacto de la Domus Aurea en el escenario urbano de Roma, ¡imaginemos cómo sería trasladar la Villa Adriana al centro de la ciudad!